AMÉRICAS

Lula da Silva: Una Sudamérica de izquierda puede aumentar la cooperación

El presidente del Congreso en Colombia, Roy Barreras, insistió en uno de los sueños de los integracionistas: una moneda latinoamericana única. ¿Qué otras propuestas de integración pueden darse con la más reciente victoria de Lula da Silva?

Luis Inácio Lula da Silva

Foto: TW-LulaOficial

LatinAmerican Post | Santiago Gómez Hernández

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Con la victoria en las elecciones presidenciales en Brasil de Luiz Inacio Lula da Silva, Sudamérica y Latinoamérica es casi por completo socialista. Movimientos cercanos a la izquierda gobiernan hoy en Colombia, Brasil, Argentina, Perú, Chile, Bolivia y Venezuela. Adicionalmente, México, Nicaragua, Honduras y Cuba también enmarcan el viraje socialista de la región. Ante un panorama en que hoy la mayoría de mandatarios son cercanos ideológicamente, Latinoamérica (o por lo menos Sudamérica) puede iniciar procesos de integración que hace mucho tiempo fueron olvidados.

Recientemente, el presidente del Congreso colombiano, Roy Barreras, retomó uno de los mayores sueños integracionistas: una moneda única sudamericana, parecida al Euro en la comunidad europea. La intención no es nueva y las propuestas integracionistas han fallado constantemente, salvo contadas excepciones. Pero ahora, con una Sudamérica más homogénea, es posible soñar con una integración mayor, que seguramente tendrá ideales mucho más socialistas que otros grupos políticos.

La moneda única

Como es claro, uno de los mayores sueños para un gran sector liberal y progresista en la región es generar una moneda única para la zona. Esta propuesta pretende reemplazar los pesos colombianos, chiles o argentinos, los bolivianos o los bolívares, los soles, los guaraníes y los reales, etc. por una única moneda. La intención es que esta moneda sea mucho más fuerte que cada una por separado. Esto facilitaría el comercio y el turismo entre cada uno de los países y también sería mucho más fuerte al momento de comerciar con esta en relación con las divisas extranjeras, como el dólar estadounidense, el euro o la libra esterlina.

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Sin embargo, también tiene factores que muchos temen o prefieren evitar. Por ejemplo, tal como lo han hecho los países miembros de la zona Euro, para adoptar una moneda única, cada nación debe renunciar a una porción de su soberanía fiscal y monetaria. Los tiempos en que un presidente manda a imprimir más billetes como método para mayor liquidez se tendrían que quedar atrás. De lo contrario, los colapsos económicos (tradicionales en la región como en Venezuela y Argentina) arrastrarían a todos los demás países.

Una posible alternativa es que países con políticas económicas similares logren estos acuerdos y vayan implementando la moneda única poco a poco.

Libre movilidad

Otra importante característica de la Unión Europea y que se ha intentado replicar en la región es la libre movilidad de las personas. En Europa, cualquier ciudadano europeo puede mudarse a otro país de la comunidad y aplicar a empleo como los ciudadanos locales. En Latinoamérica lo más parecido que existe son: “Acuerdo sobre Residencia para los Nacionales de los Estados Partes del MERCOSUR” y del “Acuerdo sobre Residencia para los Nacionales de los Estados Partes del MERCOSUR, Bolivia y Chile”.

De esta forma, es posible aplicar a la residencia legal en un país miembro. Sin embargo, en la Unión Europea no es necesario pedir permisos ante el consulado. Simplemente, se deben seguir ciertos requisitos como el empadronamiento en la ciudad y el pago de impuestos.

En Latinoamérica, debido a las constantes olas migratorias, es difícil pensar en un acuerdo donde se abran las fronteras. Países destino como Chile, Uruguay, Ecuador o Brasil, no han demostrado un interés de atraer grandes cantidades de fuerza laboral y mano de obra de Colombia o Venezuela. Sin embargo, con Gobiernos cercanos ideológicamente entre Brasil, Colombia, Chile, Venezuela y Argentina es posible mayor cooperación.

Precisamente, el mismo Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, confirmó en su cuenta en Twitter que tuvo una “buena conversación” con Lula y comunicó que retomarán “la agenda binacional de cooperación". "El presidente Luiz Inácio Lula da Silva envió su saludo y compromiso a todo el pueblo venezolano. Tenemos la voluntad de trabajar duro por el fortalecimiento de América Latina y el Caribe, y por el desarrollo económico y social de nuestros pueblos", dijo el mandatario en otro mensaje en la red social.

Protección ambiental

Otro importante elemento de cooperación que seguramente estará en la agenda de los Gobiernos sudamericanos será la protección ambiental y la lucha contra el cambio climático. No por nada, en esta zona está el llamado “pulmón del mundo”: la selva amazónica. Este bosque de gigantesca importancia para el medio ambiente y la biodiversidad mundial es responsabilidad de los Gobiernos de la región. Son Gustavo Petro, Lula da Silva, Pedro Castillo, Nicolás Maduro, Luis Arce y Guillermo Lasso los encargados de proteger el tesoro ecosistémico.

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