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Así funciona la enmienda que podría destituir a Donald Trump

El presunto complot dentro de la administración de Trump habría considerado invocar la enmienda 25 de la constitución de los Estados Unidos para acabar el actual mandato

Desde la publicación de la editorial anónima en The New York Times este 5 de septiembre, la cual sugería que un grupo de funcionarios en altos cargos del gabinete de Trump desconfiaban de sus impulsos, y activamente saboteaban los "más equivocados", el presidente y sus acólitos han entrado en crisis. La búsqueda de un culpable es lo que más aqueja a Trump, y el vicefiscal de los Estados Unidos es el más reciente candidato.

Read in english: This is how the amendment that could impeach Donald Trump works

Rod Rosenstein, quien ocupa el cargo de vicefiscal desde 2017, y que anteriormente fue fiscal general del distrito de Maryland, fue acusado por el mismo New York Times de sostener conversaciones con sus colegas en las que sugiere grabar en secreto a Donald Trump con el fin de exponer algunos de sus comportamientos más controversiales.

Pero, principalmente, Rosenstein fue acusado de discutir la probabilidad de invocar la enmienda 25 de la constitución de los Estados Unidos, algo que desencadenaría un complicado proceso para deponer al presidente Trump sin recurrir al mecanismo de "impeachment".

¿Cómo funciona la enmienda 25 de la constitución?

Esta enmienda fue adoptada en 1967, pero fue introducida años antes después del asesinato del presidente John F. Kennedy, cuando cundió el pánico en el congreso al ver que la constitución en su forma actual no contemplaba plenamente los mecanismos de sucesión entre presidente y vicepresidente. 

Pero, lo que es más importante, la constitución no contemplaba qué sería del presidente y su cargo si este fuera a quedar en un estado semiconsciente o con una discapacidad que limitase su capacidad de ejercer el cargo.

La sección cuatro de la enmienda 25 es la que atiende a este último problema. Establece que, por medio de una decisión del vicepresidente, avalada por una mayoría dentro del congreso o dentro del resto de la rama ejecutiva, puede deponer al presidente de todos sus poderes y su cargo y asumirlo él mismo. Esto en caso de que se considere que el presidente demuestra incapacidad o ineptitud al desempeñar su cargo.

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Otro paralelo entre Trump y Reagan

Si Rosenstein en realidad discutió la posibilidad de activar esta enmienda, acusación que él niega categóricamente, argumentando que "no hay bases para invocar la vigesimoquinta enmienda", no sería la primera vez que algo así ocurre.

Durante la presidencia de Ronald Reagan, hubo no una, sino dos ocasiones en las que se habló de activar la sección cuatro de la enmienda 25 de la constitución.

La primera vez fue después del intento de asesinato a Reagan en 1981, cuando se argumentaba que el vicepresidente George H. W. Bush debió haber activado esta sección de la enmienda para asumir control del Estado mientras el presidente se encontraba en cirugía y su vida en peligro, algo que le fue imposible. Esto se debe a que en ese momento se encontraba volando hacia Washington D.C.

La sección cuatro fue mencionada por segunda ocasión en 1987, cuando en un caso similar al que atormenta la presidencia de Trump, al nuevo jefe de personal en la Casa Blanca, Howard H. Baker Jr., le avisaron que tendría que contemplar su activación. El equipo de Baker recibió advertencias del equipo del jefe de personal anterior, Don Regan, que el presidente Reagan era "inatento", "inepto" y "perezoso", según recuentos documentados por la PBS.

En ninguno de los dos casos se terminó invocando la sección cuatro, y hasta la fecha, es la única sección de la enmienda 25 a la constitución de los Estados Unidos que no ha visto uso.

LatinAmerican Post | Pedro Bernal

Copy edited by Diana Rojas

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