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La NBA no será la misma sin “Manu” Ginóbili

Después de 16 años y varios legados el jugador argentino anunció su retiro. En LatinAmerican Post repasamos lo que su juego le dejó al mejor baloncesto del mundo

La NBA no será la misma sin “Manu” Ginóbili

El lunes 27 de agosto ocurrió lo que muchos fanáticos temían y diferentes medios de comunicación comentaban: se hizo oficial el retiro del basquetbolista más importante en la historia de Latinoamérica, el argentino Emanuel “Manu” Ginóbili, quien jugó 16 temporadas en la NBA. Es por eso que LatinAmerican Post le rinde un homenaje a este gran atleta continental.

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En la carta de despedida que el jugador escribió, y que fue replicada por El Clarín, señaló que: "No debo ser el único que vive y siente todo esto al retirarse, supongo que debe pasar en todo ambiente laboral, solo que en el básquet tener esta familiaridad que logramos en San Antonio es muy poco habitual. Jugar con varios compañeros por casi 16 años, con el mismo entrenador y ver muchas de las mismas caras todos los años genera un sentido de pertenencia muy fuerte”.

El portal deportes.cienradios.com informó poco después de la culminación de la campaña 2017-18 que Ginóbili sí cumpliría su año final de contrato por 2.5 millones. El artículo hizo mención a que el jugador, oriundo de Bahía Blanca en Argentina, había hablado con el coach Greg Popovich. El entrenador le manifestó las intenciones de que siguiera jugando, a lo que el argentino había convenido. Sin embargo, no fue así.

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Una carrera llena de éxitos

Apenas tenía 18 años cuando se estrenó como profesional en la Liga Nacional en Andino de La Rioja. Infobae cuenta que “Su familia respiraba baloncesto, y era representada por sus hermanos Sebastián y Leandro”. Ellos fueron su impulso, pero él los superó de tal manera, que hoy se retira dejando marcas de 14.043 puntos y 4.000 asistencias, nada más y nada menos que en la NBA.

El mismo medio refiere que a mediados de los noventa se erigió como el mejor jugador FIBA, luego sobresalió en Argentina con Estudiantes de Bahía Blanca y de allí fue directamente a Europa. Italia le esperaba y allí supo aprovechar su oportunidad tanto con el Viola Reggio Calabria como con el Kinder Bolonia. Su nombre se hizo popular en la NBA y fue así como en 1999 fue elegido en el puesto 57 del draft por San Antonio Spurs. Contrario a lo que muchos pudieran pensar, la NBA no le quedó grande y así lo reflejan sus respetables números.

 

 

En 1057 partidos dejó promedios de 13.3 puntos por compromiso jugado, 3.8 asistencias, 3.5 rebotes en una posición que poco se encarga de esa parte del juego y 1.3 robos de balón en 25.4 minutos promedio por cada partido. Además fue elegido el Sexto Hombre del Año NBA en 2008, en su primera edición. Tales logros abrieron en buena medida, las puertas a otros jugadores de FIBA América en la NBA.

Sus números trascendieron incluso a la NBA. Representando a Argentina, y junto a Luis Scola, fueron parte de la recordada “Generación Dorada”. Ganadores de la medalla dorada en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004. También la plata en el Mundial de Indianápolis 2002, el bronce en la edición olímpica de Beijing 2008. Su despedida de la “Albiceleste” se produjo en 2016 tras Río de Janeiro 2016.

Los legados

Con Ginóbili, el sexto hombre cobró una relevancia que no tenía. Que el primer jugador de la banca fuese tan importante fue gracias al argentino.  "Cambió lo que significa el premio al Mejor Sexto Hombre. Mucha gente piensa que es europeo, pero no es así. Es sudamericano. Y todos los jugadores sudamericanos con los que jugué traen esa fortaleza y esa lucha”, recalcó Kevin Durant, campeón mundial y olímpico con Estados Unidos y figura de los Golden State Warriors, al medio The Athlete. Antes de Ginóbili, el premio era relacionado con “el mejor de los malos”, y el cambió esa mentalidad.

El famoso movimiento para ir al canasto, y que “Manu” bautizó como “Euro step” lo tenía perfeccionado desde su paso por Europa y al hacerlo costumbre en Estados Unidos, todos hablaban de eso. Nada más y nada menos que LeBron James, señaló: "El baloncesto debe agradecerte el movimiento más usado ahora que es el 'Euro step'", para despedirlo con honores.

 

 

Con Ginóbili, el valor de todas las elecciones dentro del draft, no solo la primera, también cobró valor. Fue el elegido número 57 y resultó mejor que muchos. Refiere Infobae, qué a partir de esa escogencia, otros equipos comenzaron a hacer lo mismo: apostarle a jugadores no nacidos en Estados Unidos.

No era un tipo egoísta, se sacrificaba por el equipo y eso bien puede tomarse como un legado delante de tantas estrellas que no lo hacen. Ginóbili aceptó salarios más bajos de lo que su nivel requería para que pudieran llegar nombres valiosos a los Spurs como LaMarcus Aldridge y David West en la temporada 2015-16. Luego, el conjunto lo premió con un contrato mucho más “jugoso”, de acuerdo a Infobae.

 

LatinAmerican Post | Onofre Zambrano

Copy edited by Laura Viviana Guevara Muñoz

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